“Cuando tienen ideas cortas, necesitan bastones largos”. La frase fue pronunciada por Cristina Fernández de Kirchner en el 2016, durante un acto en el que se conmemoraba un nuevo aniversario de la llamada “Noche de los Bastones Largos”, hecho ocurrido un 29 de Julio de 1966.
Aquel hecho, perpetrado durante la dictadura de Juan Carlos Onganía, y aquella frase de la actual presidenta del Senado de la Nación, vienen hoy al análisis en el marco de las declaraciones del ministro de Seguridad de Chubut, Federico Massoni.
«El piquete es un delito y el que comete un delito es delincuente», expresó hace horas Massoni. Su objetivo era justificar a agentes policiales que en un curso de formación cantaban, mientras trotaban por las calles de Rawson: «piquetero, piquetero, ten cuidado, ten cuidado, en una noche muy oscura a tu villa entraré».
Paradójico es que las amenazas también representan un delito.
Y que los allanamientos policiales no pueden ser desarrollados, justamente “en una noche muy oscura” por antojo de un jefe policial o un ministro, sino que incluso la justicia (un juez por pedido de un fiscal) sólo autoriza ese tipo de operaciones policiales en casos de excepción.
Ocurre que Massoni demuestra, con sus dichos y acciones, que cree que él es la Justicia.
Cabe preguntarse si los ancianos, jubilados del Estado Provincial, que cortaron rutas e hicieron piquetes reclamando al jefe directo de Massoni, es decir Mariano Arcioni, por los sueldos aún adeudados, deben desde ahora temer a las noches oscuras.
Cabe preguntarse si los maestros, que cortaron rutas e hicieron piquetes, para que les pagaran los sueldos que el jefe directo de Massoni, es decir Mariano Arcioni, aún les debe, deben desde ahora temer a las noches oscuras.
Cabe preguntarse si los centenares de chubutenses que cada día 4 se manifiestan, en algunos casos cortando rutas, expresando el NO A LA MINA, deben temer desde ahora a las noches oscuras.
Parafraseando al ministro, se puede afirmar que quien incumple la ley, comete un delito. Y que no pagar los sueldos en tiempo y forma es incumplir la ley.
El candidato que representa a Mariano Arcioni en el proceso electoral legislativo está de campaña.
Y no cuesta mucho trabajo compararla y encontrarle similitudes con campañas que se desarrollan sobre todo en Europa por candidatos de ideología de filo neo nazi, con discursos que por un lado buscan generar división y odio en la sociedad (odio que apunta por lo general hacia los sectores sociales más pobres o desprotegidos) y por el otro presentarse como quien puede “limpiar” a la sociedad de aquellos a quienes consideran descartables.
Como en aquella noche de 1966, el reclamo, el derecho a expresarse, el manifestarse, son derechos amenazados por alguien a quien, ante la aparente falta de ideas, le cae más cómodo un discurso de bastones largos.
Marcelo Sosa, periodista
